Lámpara a mis Pies
- Daniela Orozco

- 12 jun
- 2 Min. de lectura
Tu palabra es una lámpara a mis pies;
es una luz en mi sendero…
La exposición de tus palabras nos da luz y
da entendimiento al sencillo. Salmo 119:105, 130 (NVI)
Escuchar la voz del Espíritu Santo y obedecerla es fascinante, es lo que nos hace colaborar con lo que Él está haciendo y podemos ver Su poder manifestándose y además es algo que renueva nuestra fe, porque nos permite ver que en verdad Dios nos habla y actúa.
Sin embargo, es posible que tengamos dudas constantes acerca de si la voz que oímos en nuestra mente es la voz del Espíritu o es nuestra propia voz (nuestra imaginación) o si de verdad viene de Dios lo que sentimos. Por eso necesitamos aprender a desarrollar nuestro discernimiento y hay varias cosas que nos ayudan en esto.
Por un lado, es cierto que se trata de un asunto de práctica. Cuando tú sientes que el Espíritu te está pidiendo algo y obedeces, entonces vas a darte cuenta si el resultado es de Dios o no. Y de esta manera, vas a ir identificando cuando Dios te habla.
Por otro lado, es innegable el papel fundamental que tiene conocer la Palabra de Dios, pues fue el mismo Espíritu Santo quien la inspiró, por lo que Él se alinea a Sus propios principios revelados en ella. Por supuesto que el Espíritu nos revela cosas especificas y muy concretas que probablemente no veamos en la Biblia, por ejemplo, una decisión especifica que debemos tomar. Sin embargo, la Biblia nos revela a Dios y Su carácter, así que entre mejor conozcamos esto, más fácilmente vamos a poder identificar si lo que sentimos hacer o decir “combina” con lo que sabemos acerca de Dios en su Palabra.
Además, como escribió el salmista en el Salmo 119, que, por cierto, es el más largo y está dedicado a la Palabra de Dios, cada vez que nosotros nos exponemos a la Biblia, Dios nos va dando entendimiento y revelación, de manera que va a ser más sencillo reconocer Su voz cuando nos habla de otras maneras. Por lo tanto, leer la Biblia es una disciplina básica para vivir siguiendo la voz del Espíritu.
«Señor, ayúdanos a valorar Tu Palabra, a atesorarla y estudiarla y que cada vez podamos ser más sensibles y obedientes a Tu voz. Amén.»

LINKSPACE777
BLOGGER777
LAPAKBET777ME
LAPAKBET777COM
LAPAKBET777RESMI
LAPAKBET777LOGIN
ALTERNATIFLAPAKBET
LAPAKBET777DAFTAR
LAPAKBET777OFFICIALL
LAPAKBET777VVIP
SITUSGACOR
LAPAKBET777
LAPAKBET777ALTERNATIF
GACORHABIS
LAPAKBET777TOTO
Amén