La Cruz Ofende

Hermanos, si es verdad que yo todavía predico la circuncisión, ¿por qué se me sigue persiguiendo? Si tal fuera mi predicación, la cruz no ofendería tanto…

Les hablo así, hermanos, porque ustedes han sido llamados a ser libres; pero no se valgan de esa libertad para dar rienda suelta a sus pasiones. Más bien sírvanse unos a otros con amor.  Gálatas 5:11, 13  (NVI)

Pablo se está defendiendo de la acusación de estar predicando que la circuncisión seguía siendo necesaria, pero él afirma que esto es una calumnia, pues él entendía bien que la única manera de agradar a Dios es por medio de la fe en Cristo. Sin embargo, Pablo también podía darse cuenta de que la cruz era algo que ofendía a las personas.

¿Por qué el mensaje de la cruz es ofensivo? Considero que una razón es que el mensaje de la cruz deja completamente fuera cualquier tipo de mérito propio. En el caso de los judíos que escuchaban a Pablo, la cruz significaba que todo su esfuerzo por obedecer la Ley era innecesario e insuficiente, significaba que todo su esfuerzo no los hacía mejores a cualquier gentil.

Ahora, en nuestro caso, el mensaje de le cruz implica que ninguno de nuestros esfuerzos nos hace mejores o más merecedores delante de Dios que cualquier otra persona a la que consideremos pecadora. ¡Esto es escandaloso! ¿De verdad cualquier pecador puede arrepentirse, confiar en la cruz de Cristo y ser perdonado? ¿De verdad puede encontrar perdón aquel que hizo cosas horribles? ¿De verdad puede ser hijo de Dios igual que yo que me esfuerzo en ser buena cristiana? Eso es lo que ofende todavía a las personas cuando hablamos de la cruz de Cristo. ¿Te ofende a ti? ¿te incomoda que otros puedan encontrar perdón tan fácil?

Si es así, probablemente no has entendido la profundidad de tu propio pecado. Es fácil olvidarnos de lo pecadores que somos cada uno de nosotros, pues a pesar de que nuestro propio pecado no se vea escandaloso, sigue siendo una ofensa en contra de Dios que merece la muerte. Por eso la cruz de Cristo es la mejor de todas las noticias, ¡tú y yo somos perdonados por medio del sacrificio de Jesús!

«Señor ayúdanos a recordar de donde nos sacaste, que no olvidemos que lejos de ti somos pecadores sin esperanza. Ayúdanos a no ofendernos por la cruz, sino a proclamar la salvación que hay en Ti con valor y confianza. Amén.»

P.D.

La cruz ofendía profundamente a los griegos, con su elenco de dioses, juguetones, hermosos e invulnerables y a los judíos, con sus expectativas tradicionales de un mesías militarmente regio —John Updike.