Si pertenecieran al mundo, el mundo los amaría como a uno de los suyos, pero ustedes ya no forman parte del mundo. Yo los elegí para que salieran del mundo, por eso el mundo los odia. Juan 15:19
Continuamos con el tema de que no somos del mundo y por lo tanto nuestra experiencia en esta vida es muy diferente a la experiencia de la gente del mundo. Es muy diferente porque nosotros gustamos de las riquezas eternas y la gloria celestial aún estando en este mundo. ¡Un gozo que la gente de este mundo ni puede entender! Y diferente, también, porque a veces probamos el dolor del rechazo y la segregación por no ser de este mundo.
Pablo se dirige a los corintios en uno de los pasajes más irónicos del nuevo testamento. Porque los Corintios estaban bien identificados con los valores del mundo en la cultura pagana de su ciudad. Tanto que en lugar de ser rechazados los hacían sentir “reyes y reinas del carnaval” de este mundo. A diferencia de Pablo y sus compañeros apóstoles que eran la triste cola del desfile carnavalesco de este mundo, la de los “diferentes,” los apestados.
Pablo se dirige a sus hijos espirituales en 1 de Corintios 4:10-16 y les dice irónicamente: ‘ya veo que reinan en este mundo. Ojalá de veras reinarán por que eso habría querido decir que ya vino el Reino de Dios, pero ese no es el reino de Dios, es el reino de este mundo.’ Dejémoslo hablar:
Nuestra entrega a Cristo nos hace parecer tontos, en cambio, ¡ustedes afirman ser tan sabios en Cristo! Nosotros somos débiles, ¡pero ustedes son tan poderosos! A ustedes los estiman, ¡a nosotros nos ridiculizan!
11 Incluso ahora mismo pasamos hambre y tenemos sed y nos falta ropa para abrigarnos. A menudo somos golpeados y no tenemos casa. 12 Nos cansamos trabajando con nuestras manos para ganarnos la vida. Bendecimos a los que nos maldicen. Somos pacientes con los que nos maltratan. 13 Respondemos con gentileza cuando dicen cosas malas de nosotros. Aun así se nos trata como la basura del mundo, como el desperdicio de todos, hasta este preciso momento.
14 No les escribo estas cosas para avergonzarlos, sino para advertirles como mis amados hijos. 15 Pues, aunque tuvieran diez mil maestros que les enseñaran acerca de Cristo, tienen solo un padre espiritual. Pues me convertí en su padre en Cristo Jesús cuando les prediqué la Buena Noticia. 16 Así que les ruego que me imiten.
Pablo les dice a los Corintios: hijitos míos, les ruego que no se identifiquen con el mundo ni se comporten como su gente. Sé que salir del mundo implica un sufrimiento tanto como una gloria. Sean valientes y acepten ambas cosas. Y por cierto la gloria es mucho más grande que el sufrimiento.
«Señor, una de las cosas en las que quiero aprender el contentamiento es con ese aspecto de la vida “en las afueras de este mundo” que implica dolor y rechazo. Ayúdame cuando me toque ocupar ese lugar en el desfile de este mundo. Amén»
Palabras duras de recibir, pero a quien iremos, si solo Jesús tiene palabras de vida eterna.
Gracias Pastor 🙏🏼
Arturo M.