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Concilio

  • Foto del escritor: Gabriel Miyar
    Gabriel Miyar
  • 21 ago
  • 2 Min. de lectura

»Pues nos pareció bien al Espíritu Santo y a nosotros no imponer sobre ustedes una carga mayor que estos pocos requisitos. Hechos 15:28


Hechos 15 es el escenario del primer “concilio” en la historia de la iglesia. Una reunión de líderes, servidores y, en general, del pueblo de Dios para tratar un asunto de importancia universal. La causa de esta reunión es algo que se venía arrastrando desde Hechos 10.


Aunque al parecer, en Hechos 10 y 11 había quedado resuelto el asunto de la inclusión de los no judíos en la iglesia, la verdad es que habían quedado enormes inquietudes entre los creyentes judíos. No podían entender que Dios no requiriera de los gentiles que observaran la ley de Moisés. Puesto de la manera más positiva, los creyentes judíos esperaban que estos nuevos creyentes no judíos pudieran disfrutar de los beneficios de observar la ley de Moisés. Pero Dios había sido muy claro en cuanto al asunto. Aceptó a los gentiles y les impartió el Espíritu Santo, sin necesidad de que se circuncidaran y observaran la ley, punto.


Sin embargo, aún faltaba que la iglesia, en una profunda reflexión teológica, pudiera discernir los planes y el actuar de Dios. Muchas veces, la teología implica debate, el reunirse y sopesar las opiniones e interpretaciones del pueblo de Dios en general, permitir que el tiempo dé perspectiva y evaluar la sabiduría y las consecuencias de las conclusiones a las que se llega. Esto sucedería muchas veces a largo de la historia, y desembocaría en una teología general de la iglesia cristiana. (Piensen en cosas como la Trinidad).


En Hechos 15, gracias a Dios, el Espíritu Santo imperó en la reunión y el resultado fue confirmar, por medio de un reconocimiento público y de un documento firmado, que los creyentes no judíos estaban libres de observar la ley de Moisés (de hecho, ni los creyentes judíos necesitaban ya observarla, como se ve en la vida y escritos de Pablo, y en la vida de Bernabé e incontables creyentes judíos involucrados en la misión).


Pero, este momento era crucial y extremadamente vulnerable, y pudo haber desembocado en una división, un cisma, como se les llama, entre la iglesia gentil y la iglesia judía. ¡Gracias a Dios no sucedió! Como sí sucedería después, muchas veces en la historia de la iglesia.


El Libro de los Hechos incluye muchas ocasiones similares en las que la iglesia enfrenta cambios y situaciones nuevas, y la gente tiene que decidir, con una visión limitada, el mejor curso de acción. Las decisiones rara vez siguen el mismo proceso. Como ellos, nosotros necesitamos depender de las Escrituras, de la sabiduría agregada del más amplio pueblo de Dios y sus líderes ungidos, y, especialmente, de la dirección del Espíritu Santo.


Lectura bíblica:

Hechos 15

 
 
 

2 comentarios



cynthia joselyn vazquez plaza
cynthia joselyn vazquez plaza
21 ago

La importancia que tiene la iglesia al incluir a TODOS y lo que se logra a través de Cristo Jesús, que nadie se sienta excluido de su precencia, cada uno aportando de diferentes formas y maneras, levantando una iglesia en amor y sabiduría de Dios ❤️

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