No Estén Más Tristes.

 “…No estén más tristes, pues el gozo del Señor es su fortaleza” 

Nehemías 8:10b

Cuánto hemos aprendido de unos cuantos versículos a través de las parábolas del tesoro escondido y de la perla de gran precio… (Mateo 13:44-46)

Hoy quisiera resaltar la actitud de los dos personajes que aparecen en estas parábolas; el gozo, la alegría, el entusiasmo.

Ellos comprendieron muy bien el valor del Reino, pero también pudieron identificarse con las emociones y el corazón del Padre cuando alguien entra al reino.

La palabra nos enseña que todo lo que hagamos lo hagamos como para el Señor, es decir con entusiasmo (en-theos), en Dios y para Dios. Qué maravilla poder ver que glorifiquemos al Padre en todo lo que hagamos y expresemos su grandeza, su amor y su poder…

¿Y si empezamos por darle gloria con nuestra alegría? Que bien se pasa un día cuando está lleno de alegría. La alegría es contagiosa, cambia el ambiente, trae luz, nos llena de energía y hace que las cosas que hacemos sean más fáciles y las disfrutemos.

Necesitamos tanto al Espíritu Santo. Hay tantas cosas en el mundo que estamos enfrentando que nos abruman y nos roban la alegría…

“…No estén más tristes, pues el gozo del Señor es su fortaleza” 

En ocasiones las emociones comparten residencia en nuestro corazón, es decir, podemos sentir dolor y alegría al mismo tiempo. Que nada expulse de nuestro corazón el gozo de sabernos salvos, amados e hijos de Dios.

Somos agentes del Reino y aun, cuando nos cueste dejar algo o hacer algo para el Reino de los cielos, busquemos al Espíritu Santo y pidámosle que nos llene; su presencia en nosotros trae ese gozo que necesitamos, para así sacar lo precioso de lo vil y hacer todo para el Señor con gozo y gratitud, pues tenemos el más grande tesoro.

“Señor hoy queremos pedirte que nos llenes de gozo. Queremos darte honra y ser efectivos en tu reino. Tú sabes cuantas cosas nos abruman y nos hacen andar decaídos. Llénanos, Espíritu Santo de ti, levanta nuestra cabeza y corazón para que el gozo del Señor sea hoy nuestra fortaleza”.

Ani Partida